La utilización de productos químicos en las empresas implica riesgos como reacciones químicas peligrosas, la liberación de sustancias nocivas, intoxicaciones, quemaduras, incendios o explosiones. Por ello, para evitar cualquier tipo de daño, es importante organizar bien el espacio de almacenamiento de estos productos.
En el artículo de hoy analizaremos la importancia de almacenar correctamente los productos químicos y la normativa relacionada. Asimismo, veremos la señalización necesaria que se debe utilizar en espacios donde se manipulan sustancias químicas de diversa índole.
Almacenamiento de productos químicos
El almacenamiento de los productos químicos debe realizarse teniendo en cuenta factores como sus propiedades, las cantidades manipuladas, el número de personas que acceden al espacio designado, etc. A la hora de diseñar el lugar de almacenamiento, los responsables no pueden olvidarse de que parte importante de una gestión eficaz es la eliminación adecuada de las sustancias nocivas.
El uso de los espacios de almacenamiento está sometido a reglas estrictas cuya cumplimiento debe ser controlado con frecuencia por un responsable competente. Algunas de las reglas que se deben tener en cuenta a la hora de almacenar las sustancias químicas son:
- Limitar el acceso a los productos químicos a las personas autorizadas
- Mantener actualizado el stock
- Llevar una clasificación rigurosa: colocar un cartel del plan, prohibir los paquetes voluminosos o pesados en altura, no colocar herramientas en el lugar de almacenamiento de productos químicos…
- Utilizar el método PEPS (Primero en Entrar, Primero en Salir) o FIFO en inglés
- Respetar las fechas de caducidad de los productos
- Establecer un procedimiento de eliminación de los productos caducados o que ya no sirven
- Prohibir la ocupación con productos de las vías de acceso y salidas de emergencia
Los espacios de almacenamiento deben estar identificados adecuadamente. En la entrada debe de haber paneles de advertencia y el plan de almacenamiento, en el que se indica la localización de cada uno de los productos, así como su capacidad máxima. Entre otras medidas, deben mostrarse pictogramas sobre las precauciones que se deben tomar.
Normativa sobre almacenamiento de productos químicos: el CLP.
El CLP (Classification, Labelling and Packaging) es el reglamento europeo sobre clasificación, etiquetado y envasado de productos químicos. El CLP nació para ofrecer unas directrices claras sobre los perjuicios que las sustancias químicas y sus combinaciones pueden provocar a los trabajadores.
Según el CLP, cada sustancia o mezcla química corresponde a un tipo y a una categoría de peligro. Encontramos, por tanto, pictogramas específicos para cada uno de ellos.
Almacenamiento de productos químicos: la señalización
Con la llegada del CLP, la señalización se ha ido adaptando para prevenir de forma más eficaz los incidentes provocados por las sustancias y mezclas químicas. Los antiguos pictogramas de color naranja han dado paso a pictogramas con borde rojo. Junto al pictograma podemos ver anotaciones que aportan más información sobre el riesgo y su prevención.
Otros elementos necesarios: EPI para productos químicos
Por último, además del mantenimiento adecuado y la correcta señalización de los productos químicos que se manipulan en el trabajo, no podemos olvidarnos del uso de EPI en los casos que lo requieren. Por ejemplo, trajes completos para riesgos químicos, guantes o calzado certificado para riesgos químicos. Las duchas y lavaojos son otro tipo de elemento que debe haber en lugares de riesgo en caso de que ocurra un incidente.
En conclusión, es imprescindible informar de los peligros asociados a las sustancias químicas a través de pictogramas bien definidos. En la tienda online de Naisa encontrarás cada uno de los pictogramas que hemos visto en este artículo. Además, contamos con muchas otras señales necesarias para el almacenamiento de productos peligrosos. Por ejemplo, la señal de prohibición de paso a cualquier persona no autorizada o de prohibición de dejar materiales que impidan la entrada o salida de un espacio. Cualquiera de estas dos señales serán fundamentales a la hora de cumplir las reglas que enumeramos más arriba.