En este momento estás viendo Planes de emergencia y autoprotección en eventos

Planes de emergencia y autoprotección en eventos

emergencia y autoprotección

Los hospitales, hoteles, recintos deportivos, locales donde se albergan diversos espectáculos o cuando estos se realizan al aire libre, se debe de implantar un plan de emergencia y autoprotección, con la finalidad de reducir a mínimo las posibles consecuencias de un accidente o situación de emergencia en las personas que asisten a un espectáculo o disfrutan de un evento deportivo.

Por tanto, el plan de emergencia y autoprotección tiene como objetivo optimizar todos los recursos disponibles, para ello el edificio ya sea hospital o un teatro debe de contar con todos los materiales técnicos necesarios, que implica haber realizado la evaluación de riesgos y describir las medidas preventivas para cada acción de emergencia.

¿Qué factores de riesgo justifican un plan de emergencia y autoprotección?

Los riesgos que se asumen en un plan de emergencia y autoprotección son diferentes a aquellos que se evalúan durante una actividad laboral, dado que los asistentes a un concierto o a un partido de fútbol no están obligados a disfrutar del evento con equipos de protección individual, como si debería llevar el jefe de obra que puso en pie el edificio. Los asistentes a estos eventos cuentan con que todas las medidas de seguridad están en orden ante cualquier circunstancia. Por tanto, para evaluar los riesgos se tienen en cuenta los siguientes factores:

Densidad de ocupación: en primer lugar es imprescindible respetar el aforo del local, no se deben vender más localidades de las que legalmente pueden haber dentro del recinto, sobrepasar el aforo puede provocar de por sí una situación de riesgo, solo recordad casas como el accidente sucedido en 2012 en el pabellón Madrid Arena. Este es el primer punto a tener en cuenta: respetar el aforo de la sala. A continuación, en función de este aforo, se evalúan que todas las señales estén correctamente visibles y en funcionamiento, en caso de luces de emergencia, ya que en caso de una situación de alerta todas las personas tengan claramente localizadas las salidas de emergencia, dispongan de visibilidad y puedan desplazarse con rapidez.

Características de los ocupantes: otra de las peculiaridades de los eventos es la diversidad de personas que agrupa, aunque en algunos casos podemos definir a sus asistentes por rango de edad, por ejemplo si es un espectáculo dirigido a niños o es un concierto para mayor de 18 años; su movilidad, que también está relacionada con la edad; o la disciplina, como sabéis existen partidos de fútbol con un alto riesgo debido a la concetración de hinchas, tal como ha ocurrido recientemente en el partido Inglaterra-Rusia en la Eurocopa 2016. Todo estos datos influirán en el la elaboración de las medidas preventivas en el edificio y su entorno.

Existencia de personal foráneo: Se debe tener en cuenta que un teatro, pabellón, recinto de espectáculos u hospital son lugares al que las personas no acuden diariamente y por tanto no están familiarizados con ellos, por ello deben quedar claramente indicadas las salidas de emergencia y cualquier señalización, así como normas de uso. Además, es recomendable que existan personal contratado para ayudar a los asistentes a evacuar una zona o en caso de emergencias aisladas, poder socorrer a esa persona.

Limitaciones lumínicas: en eventos con poca luz, como un concierto o un espectáculo en directo, la visibilidad de la señalización queda reducida para los asistentes, por tanto se incrementa en caso de emergencia el riesgo de caídas, empujones o atropellos.

A lo largo de la historia, se han registrado numerosos accidentes, muertes y heridos a causa de incumplimientos de los planes de emergencia y autoprotección, bien por su ausencia o por no llevarlos a cabo a raja tabla. En la mayoría de casos, podrían haberse evitado males mayores, en otros es sencillamente imposible. Pero siempre se deben contemplar riesgos como incendios, explosiones, fugas o derrames, e incluso, a pesar de que a estos eventos las personas van a disfrutar, se puede producir desorden social. Ante todo esto, se ha de estar prevenido, preparado y con un plan de emergencia y autoprotección que permita minimizar los daños y accidentes ante cualquier riesgo posible.

 

Naisa

Técnico PRL asesor en EPIs y vestuario laboral

Deja una respuesta