La diabetes es una enfermedad crónica que se caracteriza por el exceso de glucosa en sangre (hiperglucemia). Las personas diabéticas tienen riesgo de sufrir ciertas complicaciones, como enfermedades renales, afecciones de piel o problemas en los ojos o en los pies. Una de las consecuencias más dolorosas es la conocida como “pie diabético”, una infección que destruye parcialmente tejidos y causa problemas en los pies.
En un artículo anterior nos centramos en la salud del pie y en cómo elegir el calzado adecuado para cada trabajo. Pues bien, en el artículo de hoy nos centraremos en el pie diabético y veremos de qué formas puede una persona diabética cuidar al máximo la salud de sus pies en el trabajo.
Qué es el pie diabético
El principal causante del pie diabético es el hecho de que la diabetes ataca a los nervios: son ellos los que se encargan de transmitir estímulos y controlar los músculos. Por tanto, cuando el nervio es atacado pueden surgir muchos efectos adversos vinculados a estas acciones, como falta de sensibilidad, dolor, problemas de musculatura o inestabilidad a causa de deformidades. Uno de los problemas derivados de la falta de sensibilidad, por ejemplo, es no notar cuando nos hacemos una herida.
Algunos de los síntomas del pie diabético son, pues, falta de sensibilidad en el pie, cambio de color, hormigueo, cortes y heridas o deformaciones del pie.
Según la gravedad de esta dolencia, existen varios grados. El menos grado es el 0, aquel en el cual no hay lesión, y el máximo es el grado 5. Este último podría consistir en una gangrena en todo el pie y podría llegar a ser necesaria la amputación.
Prevención y cuidados para el pie diabético
Es importante que la persona diabética realice un control periódico de glucemia. Además, como en muchos otros casos, la prevención desempeña un papel fundamental, pues permite prevenir y reducir el riesgo de complicaciones.
Teniendo en cuenta la importancia de este problema, son muchos los profesionales del sector de la salud laboral que trabajan continuamente para evitar que los pies de las personas diabéticas no sufran más de lo necesario, intentando siempre buscar la mejor opción. A día de hoy, las personas con esta enfermedad son muchísimas y son muchos los recursos que se invierten para frenarlo.
Cómo puede un diabético cuidar sus pies en el trabajo
Para las personas diabéticas, es imprescindible elegir un buen calzado para evitar dañar el pie o evitar que el dolor aumente. Veamos a continuación algunas recomendaciones que debemos tener en cuenta:
- Es importante el uso de una plantilla adaptada. A fin de evitar posibles torceduras y deformidades en el pie, es necesario usar plantillas especiales adaptadas, no solo a nuestro pie, sino también a nuestro calzado. También existe la opción de hacerlas a medida si fuera necesario, asegurando la total integración con nuestro pie.
- El calzado escogido tiene que ser cerrado para evitar posibles lesiones. Un zapato abierto facilita que el pie tenga más movilidad y, por tanto, se pueda salir de la zona de seguridad (los bordes de la plantilla, por ejemplo).
- El calzado ha de ser transpirable. Aunque no sea un zapato abierto, debe ser lo más transpirable posible, por lo que se recomiendan materiales de calidad y evitar todos aquellos que tengan una base sintética.
- Como ya hemos dicho, la falta de sensibilidad puede provocar lesiones. Para evitarlas, se recomienda que el calzado no tenga costuras por dentro ni encajes que pudieran causar pequeñas rozaduras o heridas.
- Si se requiere el uso de calcetines o medias, vale la pena también prestar atención a los materiales, pues no todos sirven para esta causa. Por ello, es recomendable acudir a tiendas especializadas e indicar claramente que son para personas con pie diabético. No deben apretar ni deben estar fabricados con tejidos que puedan provocar alergias o rozaduras y, además, deben ser lo más transpirables posible.
- Igualmente, existen sistemas que permiten aplicar medicación a través de las plantillas o el calzado mismo. De esta forma, el paciente podría ir sintiendo que el dolor se calma a medida que anda. En este caso, es necesaria la consulta con un especialista, quien propondrá la mejor solución para cada caso.
Zapatos para pie diabético
Teniendo en cuenta las anteriores indicaciones para diabéticos que deben cuidar la salud de sus pies en el trabajo, podemos recomendar algunos modelos de calzado. Por ejemplo, un buen modelo de zapato para diabéticos sería la bota de seguridad Panter Fragua Plus S2, que cuenta con una horma ancha y acolchados interiores que evitan las rozaduras. Se trata de un zapato de seguridad cómodo y transpirable.
Otra opción más económica podría ser la bota de seguridad S3 modelo Segura, fabricada en piel, sin piezas metálicas, muy flexible y realmente cómoda.
En el presente artículo hemos aprendido un poco más sobre una dolencia asociada con la diabetes: el pie diabético. Como hemos visto, es necesario que las personas diabéticas tomen ciertas precauciones para prevenir y minimizar las consecuencias de esta afección. El uso de calzado cómodo y transpirable, con plantillas adaptadas y calcetines holgados e hipoalergénicos es una de las principales recomendaciones para cuidar la salud de los pies en el trabajo.
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