Botas de agua y calzado de protección laboral para el frío
Por botas entendemos todo aquel calzado que cubre por completo tanto el pie como el tobillo, independientemente de cuál sea su altura total. El objetivo de una bota es proteger esas dos partes de nuestras extremidades, ya sea de golpes con objetos duros, bajas temperaturas o líquidos varios. Aunque las llamemos botas de agua, la realidad es que este calzado de trabajo es una garantía de seguridad contra muchas otras sustancias que pueden ser nocivas para nuestra salud e integridad física.
Las botas de agua y para el frío son un calzado imprescindible en muchos lugares de trabajo, ya sean exteriores o interiores, y es que el nivel de protección que proporcionan es considerable. Gracias a su altura y sus propiedades impermeables, estas botas impiden el paso del agua y demás líquidos y evitan que entren en contacto con nuestros pies y tobillos. Así, nos protegen de los altos niveles de humedad presentes en el espacio, como las zonas nevadas, con barro, marítimas o sitios interiores donde el uso del agua es frecuente, como en las instalaciones de una empresa alimentaria.
Por supuesto, este calzado de seguridad de trabajo cumple otra función esencial: protegerte de las bajas temperaturas. El interior de las botas para el frío está diseñado para conservar el calor mediante un forro de tela de alta calidad. De esta forma, disfrutas de un aislamiento térmico efectivo sin comprometer en ningún instante tu seguridad en el trabajo. En Naisa te ofrecemos botas de agua y para el frío con suelas antideslizantes y fuerte agarre, lo cual las hace útiles no sólo para superficies mojadas, sino también para terrenos irregulares.
Características de las botas de agua y calzado para el frío de trabajo
En Naisa creemos que toda bota de agua y para el frío debe cumplir unos mínimos requisitos para que puedan garantizar tu seguridad laboral. Este calzado tiene que protegerte de la humedad, del frío, de los productos líquidos y químicos con los que trabajes y, por supuesto, de cualquier objeto pesado cuyo uso conlleva determinados riesgos. Ante todo, estas botas deben garantizar tu integridad y salud físicas y ser cómodas de vestir.
Por eso, consideramos que estas son las características básicas que toda bota de agua y para el frío debe tener:
- Fabricación en PVC o nitrilo con caña alta S5. De esta manera, se reducen al mínimo posible las probabilidades de que entre el agua al interior.
- Puntera de acero reforzada para proteger contra los golpes e impactos, sobre todo en caso de trabajar con maquinaria pesada.
- Suela antideslizante para prevenir caídas y lesiones. También ha de ser resistente a los hidrocarburos para evitar el desgaste, además de antiestática si trabajas en un espacio con muchos dispositivos y aparatos eléctricos.
- El forro de tela interior debe estar fabricado con nylon.